La Obesidad y el sobrepeso constituyen un gran problema en nuestra sociedad. Según nos indica la OMS (Organización Mundial de la Salud) se calcula que más de 41 millones de niños menores de cinco años en todo el mundo padecen de sobrepeso o eran obesos. España tiene una de las tasas más altas en obesidad infantil, la cual ha aumentado a un ritmo alarmante en los últimos años.
La Obesidad, debemos entenderla como una enfermedad la cual esta relacionada directamente con el 15% de la mortalidad en diferentes sexos, con un importante componente genético, aunque la principal causa, es un estilo de vida poco saludable o la presencia de trastornos psicológicos como puede ser la ansiedad, estrés, depresión… Las familias españolas, cada vez más alejadas de la “dieta mediterránea”, no están lo suficientemente concienciadas de la necesidad de mejorar sus hábitos nutricionales y de una educación nutricional adecuada desde edades tempranas.
“Cuatro de cada diez progenitores tienen una percepción errónea del peso de sus hijos (el 42,3 por ciento), y el 43% consideran que sus hijos no están en un peso adecuado y no toma medidas para solucionarlo”.
¿Cómo poner fin a la obesidad?
la única forma de acabar con cualquier problema de sobrepeso, es eliminado todas aquellas grasas y alimentos no saludables, aumentando la ingesta de sustancias vitales y olvidarnos de falsas dietas milagro y todas aquellas sustancias engañosa “quemagrasas” perjudiciales para nuestra salud.
Hemos recalcado anteriormente la importancia de una educación nutricional desde edades tempranas para prevenir el sobrepeso y todas aquellas enfermedades derivadas de este problema. Desde Cirtema, fundamentamos esta educación en tres pilares fundamentales, los cuales nos ayudarán no solo a acabar con la obesidad, también a su prevención:
- Alimentación.
Reducir al mínimo el consumo de alimentos de origen animal, es decir, toda carne, pescado, charcutería, huevos, leche, queso, yogurt. Solo está permitido la nata fresca y la mantequilla por su alto contenido de vitaminas solubles en grasa. No beber refrescos con azúcares o edulcorantes. No beber zumos, ni siquiera los recién exprimidos. evitar por completo la comida procesada. Toda aquella comida envasada ha pasado previamente por una fábrica, haciendo desaparecer gran parte de sus nutrientes, añadiendo sustancia perjudiciales para nuestra salud. El pan y la bollería son conservas de harina refinada, evítalas.
Gracias a nuestra experta nutricional en Granada, Jeannette de Buck, licienciada por la universidad de Múnich, obtenemos este y otros muchos consejos para conseguir, con una serie de sencillos cambios en nuestro día a día y eligiendo alimentos sanos, un estilo de vida saludable, previniendo de esta manera problemas de sobrepeso y la obesidad.
- Ejercicio.
La actividad física más recomendada especialmente si estás empezando a practicar ejercicio y lo que buscamos es la perdida de peso, es caminar a buen paso, recomendado por su práctica sencilla, moderada y completa, recomendamos 5 días a la semana, aproximadamente 1 hora de actividad.
- Descanso.
Dormir entre 7-8 horas es suficiente y fundamental para la salud y el bienestar. ¿Qué conseguimos? la memoria mejora, el sistema inmune se ve fortalecido, la presión sanguínea baja y la inflamación en el cuerpo se reduce gracias al reposo, la concentración y capacidad mental mejora, ganando en energía que nos ayudara afrontar de mejor manera el día a día, además de mejorar nuestro humor.
